Lu Jingsheng

La lengua de Cervantes en tierra de ConfucioLu Jingsheng
Universidad de Estudios Internacionales de Shanghai (China)

Resumen

Ya al comienzo del siglo xvii, Cervantes soñaba con «fundar un colegio donde se leyese la lengua castellana» en tierra de Confucio. Hoy en día, ese sueño es una realidad. La enseñanza del español en China ha recorrido medio siglo y ha alcanzado una extensión considerable en el contexto de la apertura china al exterior y de la globalización. El español y el chino son dos idiomas muy diferentes tanto en las formas lingüísticas como en la sustancia cultural, y el aprendizaje del uno presenta diferentes aspectos y grados de dificultad para los hablantes del otro. El análisis permite afirmar que, como una de las consiguientes reflexiones metodológicas, es de importancia especial conocer las facetas contrastivas y tenerlas siempre en cuenta en los diversos aspectos y procesos de la enseñanza y el aprendizaje del español para estudiantes chinos.

El gran filósofo y pedagogo chino Confucio no tuvo, en el remoto siglo v a. C., la visión futurista para predecir el nacimiento de una lengua que ha ido convirtiéndose en una de las más usadas en el mundo y con la que se produjo una de las obras literarias más importantes de la historia humana.

Y ya a principios del siglo xvii, el autor de dicha obra, Cervantes, pudo concebir, con su extraordinaria imaginación literaria, la promoción de la enseñanza de español en tierra de Confucio. En la dedicatoria de la segunda parte de Don Quijote, escribió:

(…) el grande Emperador de la China me escribió una carta con un propio, pidiéndome, o, por mejor decir, suplicándome se le envíese, porque quería fundar un colegio donde se leyese la lengua castellana, y quería que el libro que se leyese fuese el de la historia de Don Quijote.

Sin embargo, esta gran empresa permaneció durante tres siglos y medio como un sueño propio del Manco de Lepanto. La fundación de «colegios» imaginados por el ingenioso escritor español donde se enseña su idioma no se inició en tierra de Confucio sino hasta mediados del siglo pasado.

Génesis y presente del español en China

Los contactos entre China y el mundo hispánico se inician en épocas remotas con versiones hipotéticas y hechos históricos. Ya en la época resurgida de la Ruta de la Seda, China y España se encontraban en sus dos extremos. El español se convirtió para Europa en la lengua que dio a conocer el país del extremo oriental de Asia.

A mediados del siglo xvi, gracias a las transacciones que llevaban a cabo los comerciantes marítimos chinos y los navegantes españoles provenientes de la Nueva España (México) en las islas Filipinas, se formó una ruta marítima de comercio entre China (sur), Filipinas (Manila) y México (Acapulco), conocida como Ruta de la Seda en el Pacífico, mediante la cual se fomentaron los primeros comercios de China con América Latina y, a través de esta, con España. Los viajes marítimos se hacían con los recordables galeones de Manila, llamados también las naos de China.

Los contactos se registraron también en el terreno lingüístico, como el deseo del mismísimo Cervantes, quien soñó con introducir la lengua castellana en la China. Hay publicaciones sobre el español para chinos antes y después de Cervantes.

En 1952 se creó el primer Departamento de Español, con un curso oficial en la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing que marcó el génesis de la enseñanza de dicho idioma como carrera universitaria en China.

Actualmente, la enseñanza de español se realiza en China con una gama completa de cursos. Los cursos universitarios conducentes a títulos académicos a niveles de licenciatura, diplomatura, maestría y doctorado solo se pueden impartir en las escuelas superiores oficialmente autorizadas. En la actualidad, 36 centros docentes superiores tienen departamento de español, donde se hallan vinculados unos 200 profesores chinos y unos 40 extranjeros y matriculados unos 4000 estudiantes de carrera.

Tabla 1. Crecimiento de la admisión anual de estudiantes de licenciatura y diplomatura en español (1997-2006)

Además, hay cursos de español en estudios secundarios y primarios a partir del tercer curso (9 años), cursos con fines específicos para empresas, cursos universitarios de español como segunda lengua extranjera y cursos libres extraescolares, y llega a millares el número de personas que aprenden el español de diversas formas.

El español para aprendientes chinos

¿Cómo se ve la enseñanza del español a los chinos? Si existen esfuerzos por encontrar la metodología más adecuada a la enseñanza del español a ingleses, franceses, italianos y hasta portugueses, es de importancia singular la búsqueda de una óptima metodología a los chinos, ya que el español y el chino son dos idiomas muy diferentes tanto en la forma lingüística como en la sustancia cultural.

En los estudios de la comunicación intercultural se plantea el concepto de grados de diferencia cultural entre diferentes comunidades culturales; se puede representar sinópticamente en una cadena continua de diferencia mayor a diferencia menor: 1

Diferencia mayor

Oriental ←------------------------------------------------→ Occidental

Italiana ←----------------------------------------→ Saudí

Norteamericana ←---------------------------→ Griega

Norteamericana ←--------------------→ Alemana

Norteamericana ←--------------→ Canadiense francesa

Norteamericana ←----------→ Inglesa

Norteamericana ←------→ Canadiense inglesa

Norteamericana urbana ←--→ Norteamericana rural

Diferencia menor

Creemos conveniente considerar también distintos grados de la diferencia lingüística para aplicar adecuadamente la metodología.

En los estudios de la comunicación intercultural se plantea el concepto de grados de diferencia cultural entre distintas comunidades.

Creemos conveniente considerar también diferentes grados de la diferencia lingüística para aplicar adecuadamente la metodología.

En términos generales, se puede decir que en la secuencia de diferencia lingüística, el chino, como prototipo de las lenguas analíticas o aislantes, y el español, como ejemplo de las flexivas, se encuentran en los dos extremos; entre los dos se halla el inglés, y entre este y el español, que son primos, se pueden situar el francés, el italiano y el portugués, lenguas hermanas del español.

Tabla 2. Diferencias de formas entre chino, español e inglés
  Chino Inglés Español
Genealogía Chino-tibetana Indoeuropea
germana latina
Escritura Caracteres Letras latinas
Etimología   60 % latín 75 % latín
Clase pal. -art. + clasif. 9 clases iguales
Demarcación de palabra Conceptual y funcional Formal(separabilidad)
Flexión Casi nula Algo Abundante
Conversión General Mucha Poca
Género —— —— Sust., ar., adj., pron.
Número —— Sust. Sust., ar., adj., pron.

Según James I. Brown,2 español e inglés tienen por lo menos más de un 60 % de su léxico de origen grecolatino, lo que no se conoce en absoluto en chino. Ambas lenguas usan letras latinas como su escritura, que es totalmente diferente de la china pictográfica e ideográfica.

La clasificación de palabras en español e inglés sigue el mismo criterio clásico: nueve clases de palabras. En cuanto al chino, sin mencionar su complejidad en la clasificación, lo claro es que no tiene el artículo, pero sí el medidor (o clasificador), que no existe en las lenguas occidentales.

Tanto español como inglés tienen la palabra como unidad básica, que lleva pausa virtual en el discurso y/o espacio divisorio en la escritura. Su delimitación es fácil debido a una de sus características más relevantes: la separabilidad.3 La palabra española puede ser de un morfema, de varios morfemas, de una frase (por ejemplo cortaplumas) o de una oración compleja (por ejemplo correveidile), pero siempre se usa como un conjunto unido e inseparable.

En términos comparativos, es diferente la delimitación de la palabra entre los dos idiomas en cuestión. En el chino destaca el criterio conceptual, pero el concepto de por sí es difícil de delimitar exactamente. Sin embargo, el criterio de la separabilidad tiene en cierto sentido un carácter absoluto en la delimitación de la palabra, por lo que facilita el conocimiento de la palabra en español.

El chino tiene una delimitación clara del morfema, mientras que el español la tiene de la palabra. El español toma la separabilidad como criterio para delimitar la palabra. Este procedimiento no produce dificultad para que el estudiante chino distinga las palabras en español. Sin embargo, debido a la trinidad de sílaba, morfema y carácter en su lengua materna, el estudiante chino está acostumbrado a conocer una palabra desde el morfema (carácter), para luego entender la palabra, lo que implica en la práctica un procedimiento de morfemas a palabras. La palabra española se presenta ante el estudiante chino como un bloque entero. En el aprendizaje del español, se suele empezar por conocer la palabra para extenderse luego a la frase y a la oración.

En la morfología, español e inglés presentan similitudes en muchas categorías. Ambos tienen flexiones, pero en diferente grado: el español tiene complicados accidentes en sus palabras: géneros, números, modos, tiempos y personas, un verbo de conjugación completa puede tener hasta un total de 115-118 formas flexivas, lo que constituye un verdadero rompecabezas para los chinos habituados a su lengua básicamente aislante. El inglés no tiene cambios de género, y el del número solo en el sustantivo; su conjugación verbal, con unas 30 formas discutibles en el criterio español, es mucho más sencilla que la española.

Estos fenómenos gramaticales no suelen verse en chino. Las palabras conceptuales no llevan formas gramaticales, su categoría morfológica depende en gran medida de su distribución y su función en el sintagma.

La estructura sintáctica es similar entre español e inglés, con una orientación principal a la oración (sujeto-predicado), muy distinta de la sintaxis china, orientada al discurso (tópico-comentario). Metafóricamente, la oración española es como una cadena de sintagmas con signo gramatical cuyas relaciones sintácticas son explícitas y formales, mientras la oración china puede considerarse una secuencia de conceptos cuyas relaciones sintácticas dependen, en gran dosis, del orden y el contexto en que se encuentran. Comparativamente, la relación sintáctica española es rigurosa y complicada, la inglesa es menos complicada y la china es simplemente sencilla.

Por consiguiente, los elementos gramaticales en la oración española, tales como artículo, régimen prepositivo, pronombre, elementos conjuntivos, usos de modos y tiempos del verbo, estructura sintáctica de oraciones transitiva, intransitiva y pronominal en sus diferentes valores, son complicados y constituyen diferentes grados de dificultad para los estudiantes chinos.

En cuanto a los aspectos semántico, estilístico y pragmático, también existen problemas de comprensión y asimilación en el aprendizaje. Además, el español se habla en tantos países y tan distantes algunos de otros que se presentan muchas modalidades regionales con sus modismos propios, lo que significa otro problema para la enseñanza del español a alumnos chinos.

Las diferencias entre las civilizaciones china y occidental son multifacéticas. La china sostiene la unidad entre la naturaleza y el hombre y persigue la armonía mediante la obediencia y la adaptación. La occidental tiende a dividir el universo en dos mundos, natural y humano, enfatizando la oposición y la conquista de la naturaleza por el esfuerzo humano. La china enfatiza la orientación al colectivismo, superpone el interés de la familia al del individuo y el de la nación al de la familia y cuida mucho lo que se dice o pasa en su entorno; la occidental tiende al individualismo, defiende la independencia, la autonomía y la privacidad. La china prepondera la estabilidad, y la occidental el cambio.

Obviamente, son muy grandes las diferencias entre las lenguas china y española y las dos culturas, diferencias que existen en todos los planos idiomáticos, pragmáticos y culturales. En muchos casos, por un descuido se provocarán problemas de comunicación, incluso en el plano fonético. Por ejemplo, el chino mandarín no distingue los fonemas oclusivos entre sordo y sonoro, sino entre aspirado y no aspirado, razón por la que se causan confusiones por descuido. Si la confusión sucediera al invitar a tomar una copa de pino/vino, se toleraría gracias al contexto; si se invitara a ver una función de la panda/banda china, el interlocutor lo sentiría un poco chistoso y preguntaría si tendría que ir al circo o al teatro; si saludaran o se despidieran pidiendo un peso/beso, se provocaría molestia; pero imagínese lo escandaloso que podría ser el mismo error cuando un guía de español explicara a los turistas antes de salir del hotel para la visita: «Ahora quiero llevarles a conocer un lugar donde hay una buda famosa y muchas budas bonitas».

Reflexiones metodológicas

Dada la gran diferencia entre el chino y el español, tenemos las siguientes reflexiones metodológicas en la enseñanza y el aprendizaje de español:

Consideramos muy importante el conocimiento de los aspectos contrastivos entre los dos idiomas para un buen profesor de español a estudiantes chinos. En los departamentos de español de las universidades chinas, trabajan fundamentalmente profesores chinos de español, quienes por sus experiencias de aprendizaje de español conocen los elementos comunes y distintos entre los dos idiomas y las dos culturas, y por consiguiente saben el qué y el porqué de las dificultades de sus alumnos y cómo orientarlos para superarlas. Naturalmente, esta superioridad tiene que ser complementada con la presencia de profesores hispanohablantes nativos, a quienes se recomienda conocer las características de la lengua y la cultura china para que pongan en pleno juego sus superioridades en habilidades lingüística y cultural.

El uso de una lengua es prácticamente un hábito. Nuestros alumnos (adultos ya) intentan dominar la lengua española en el nivel más alto posible, pero también en un proceso lo más rápido posible, y para ello tienen que conseguir el complejo sistema de nuevos hábitos que para ellos representa el uso del español. El único camino para llegar a la meta propuesta es hacer ejercicios intensivos y estructurales, muchas veces repetitivos e incluso monótonos, pero siempre con mucha fuerza.

Dadas las grandes diferencias, es importante conocer diversas facetas culturales en contraste y fomentar la competencia intercultural del estudiante para formar el hablante intercultural, 4 capaz de establecer lazos entre su propia cultura y otras, de mediar y explicar la diferencia y, fundamentalmente, de aceptar esa diferencia y vislumbrar la humanidad subyacente que la compone.

Es conveniente establecer un sistema didáctico basado en las características contrastivas de las dos lenguas y adecuado al aprendizaje de los alumnos chinos. Elaboramos un Plan Curricular de Español para cursos de Licenciatura en Filología Hispánica, que tiene carácter orientativo para todos los cursos de licenciatura y sirven de criterio para controlar el avance del curso y garantizar el nivel de los estudiantes respecto al dominio del español. Paralelamente con el examen de DELE, tenemos un sistema propio de evaluación de niveles de español: EEE-4 y EEE-8, que se organizan una vez al año.

Los departamentos de español suelen dedicar buena parte de sus esfuerzos a elaborar libros didácticos de español adecuados al aprendizaje de los estudiantes chinos. Cabe mencionar la tenacidad de los hispanistas chinos para facilitar la comunicación entre los chinos y los hispanohablantes, reflejada en la elaboración de diccionarios bilingües en los dos idiomas: más de veinte publicaciones entre las de bolsillo y las mayores que el DRAE.

Es importante diseñar bien el plan de estudios o la disposición de las asignaturas. Las asignaturas propias del español se pueden dividir en dos periodos: dos años de iniciación para las destrezas básicas del español y otros dos de especialización para que los alumnos profundicen tanto en el español como en la cultura hispánica. Las asignaturas de español se pueden clasificar en dos bloques: prácticas y teóricas.

En la metodología didáctica, para los cursos de licenciatura, se enfatiza un método integral perseguido con una distribución adecuada de asignaturas, que combina los modernos métodos audio-oral, estructural, comunicativo y nocio-funcional con los métodos tradicionales: de gramática y traducción. Para una asignatura determinada predomina algún que otro método concreto, y en el conjunto de asignaturas se unen lo aprovechable y lo ventajoso de diversos métodos para conseguir el mayor rendimiento posible. Para algunos cursos con fines específicos prevalece el método comunicativo en algunos casos y el de lectura-comprensión en otros.

Retos y oportunidades

Personalmente, soy optimista respecto a un mayor crecimiento del español en China por las siguientes razones:

El mundo hispánico y China son dos mercados económicos gigantescos con ricos recursos naturales y humanos: unos 20 millones frente a otros 10 en cuanto a la superficie (kilómetros cuadrados) y unos 600 millones frente a otros 1300 en cuanto a la población. Existe una gran complementariedad en cuanto a las necesidades y las potencialidades.

También hay un aumento constante de contactos y relaciones en diversos aspectos económicos y socioculturales.

Próximamente, China será escenario de dos eventos de participación masiva internacional: los Juegos Olímpicos de Beijing en 2008 y la Exposición Universal de Shanghai en 2010. El mundo hispánico, por el número de países y la cantidad de hablantes, es ya objeto de promoción para China.

Es obvia una perspectiva alentadora para el crecimiento del español en China. No obstante, los hispanistas chinos nos encontramos con algunos retos, el mayor y más serio es la formación de profesores de español cualificados. Francamente, calculamos un número de estudiantes de español entre 6000 y 10 000, lo que significa una proporción mínima, insignificante para una población que todo el mundo conoce. Es la falta de profesores capacitados lo que limita un mayor crecimiento de estudiantes de español.

En fin, los retos nos exigen a los hispanistas docentes chinos trabajar más, y los retos significan también oportunidades para las instituciones del mundo hispánico dedicadas a promover el crecimiento del español fuera del mundo hispánico y para los profesionales dedicados a la enseñanza del español como lengua extranjera. He aquí un mensaje de mis colegas chinos para quienes se interesen por el español en China: bienvenidos todos a China.

Publicaciones del autor sobre el tema

  • 2006: «Diseño de asignaturas por series y aplicación integral de métodos en la especialidad de lenguas extranjeras», Anthology of the first Internacional Conference on Foreign Language Teaching Methodology in China, Shanghai: Waijiaoshe, pp. 78-83.
  • 2005: «Enseñanza del español en China, las lenguas extranjeras en un mundo cambiante», Selección de textos del 11.º Encuentro Nacional de profesores de Lenguas Extranjeras, México: UNAM, pp. 67-84.
  • 2005: Análisis y cuestionarios del Examen EEE-4 en 1999-2004 (director), Shanghai: Waijiaoshe.
  • 2003: «Estrategia de desarrollo de la especialidad universitaria de filología hispánica en el nuevo siglo», en Dai Weidong (dir.): Reforma y práctica de la enseñanza de lenguas extranjeras, Shanghai: Waijiaoshe.
  • 2000: «Diferencias lingüísticas entre chino y español y estrategias didácticas del español», Actas del 4.º Simposio de la Enseñanza de Lenguas Extranjeras, Taiwán: Univ. Takang.
  • 2000: Enseñanza e invesrtigacion del español en China, Madrid: AACh.
  • 1999: «Un estudio contrastivo del sistema morfológico entre chino y español», Actas del Simposio Internacional de Hispanistas 98 de Beijing, Shanghai: Waijiaoshe.
  • 1996: «Enseñanza e Investigación de Español en China», Actas del IV Congreso de la Asociación Asiática de Hispanistas, Seúl.
  • 1991: «Estudio contrastivo entre sistemas fonológicos chino y español», Palabras de UD, Bogotá: Universidad Distrital.
  • 1989: «Hispanismo en China», Palabras de UD, Bogotá: Universidad Distrital.

Notas

  • 1. Porter, Richard, y Larry Samovar: An Introduction to Intercultural communication, Belmont (California): Wadsworth Publishing Company, 1994.Volver
  • 2. James I. Brown: Reading Power, Houghton Mifflin Company, 2002.Volver
  • 3. RAE: Esbozo de una nueva gramática española, 1978, p. 163.Volver
  • 4. Byram, M. y M. Fleming: Perspectivas intelectuales en el aprendizaje de idiomas, 1998, versión española 2001, Madrid: Cambridge University Press.Volver