Los idiomas mayas y el idioma español tienen diferente estatus social, político y religioso en el territorio nacional. En Guatemala, el único idioma oficial es el español. Recientemente, se han reconocido como idiomas nacionales los de origen maya, el xinka, garífuna y el español. Se cuenta con algunas fuentes documentales que registran el uso de idiomas mayas; por ejemplo, el Popol Wuj contiene el ojer tzij («la palabra, historia antigua»); este fue escrito en el idioma k’iche’, con el alfabeto latino del siglo XVI (Nim Chokoj). Otro ejemplo es la Teología Indorun, este documento fue escrito en varios idiomas mayas, por Fray Domingo de Vico y fue utilizado como instrumento para la cristianización y castellanización. En el ejemplo del Popol Wuj se dice: Wa’e xchiqatz’ib’aj chi upam chik uch’ab’al Dios, pa christianoil chik. Xchiqelesaj rumal maja b’i chik ilb’al re Popol Wuj («Esto lo escribiremos en las prédicas de Dios, en el cristianismo. Vamos a sacarlo a la luz porque ya no hay dónde ver el Popol Wuj») (Sam, 2008, pp. 22-23).
En Guatemala, actualmente se hablan 22 idiomas mayas, más el xinka, el garífuna y el español. La cantidad de hablantes de cada uno de los idiomas mayas es variable; por ejemplo, los idiomas k’iche’, kaqchikel, q’eqchi’ y mam tienen más de un millón de hablantes, mientras que el resto tiene entre ochenta y cien mil hablantes; unos pocos, los menos, tienen menos de dos mil hablantes, como en el caso del itzaj, el mopan y el teko. En estos últimos solo quedan de 5 a 8 ancianos que hablan y conservan dichos idiomas en cada comunidad lingüística.
Existen varios factores para que los idiomas mayas se estén perdiendo paulatinamente. Uno de estos, es que muchos maya hablantes se han desplazados a otros territorios de la región guatemalteca o fuera de ella por situaciones políticas, sociales o desastres naturales. Como consecuencia, muchas personas y familias completas se han establecido en México, Estados Unidos y Canadá principalmente.
A pesar de lo ya dicho, las personas y familias tratan de utilizar y conservar su cultura y sus idiomas mayas, como medio para defenderse y conservar su identidad, aunque, muchos padres ya no enseñan el idioma maya a sus hijos nacidos en dichos países donde residen.
Así, los idiomas indígenas empiezan a dormir o descansar, hasta llegar a morir. Si estos idiomas son documentados estarán durmiendo años y décadas para despertar y dar de nuevo vida en las familias y en los pueblos. Si no hay documentación, el idioma y la cultura se muere.
Desde este contexto político y lingüístico, en Guatemala se consideraba que los idiomas mayas no podrían ser oficiales porque carecen de gramáticas escritas. Sin embargo, en el artículo 66 sección 3ª de la Constitución Política de la República de Guatemala (Protección a grupos étnicos, Comunidades indígenas) se reconoce que Guatemala está formada por diversos grupos étnicos entre los que figuran los grupos indígenas de ascendencia maya. El Estado reconoce, respeta y promueve sus formas de vida, costumbres, tradiciones, formas de organización social, el uso del traje indígena en hombres y mujeres, idiomas y dialectos.
Lo normado mediante el artículo mencionado no se cumple en materia de protección y respeto. Muestra de ello son las luchas constantes de organizaciones de los pueblos originarios, para reclamar dichos derechos, en materia de respeto del uso de los idiomas en los medios de comunicación, y del uso de la indumentaria de los pueblos originarios.
En 2003, el artículo 66 fue sometido a una opinión consultiva por solicitud del Congreso de la República, ante la Corte de Constitucionalidad. Se argumentaba que el Estado guatemalteco ha ratificado el Convenio 169 de la OIT versa sobre pueblos indígenas y tribales en países independientes... Dicha petición no procedió. Todo lo relacionado con los pueblos indígenas en Guatemala no ha procedido. Sin embargo, sí han procedido políticas y programas de desplazamiento de los idiomas mayas que se han usado para la homogenización de los idiomas y la cultura de los pueblos originarios en Guatemala. Uno de estos es el Decreto Gubernativo No. 164 de 1871 promulgado por el gobierno de Justo Rufino Barrios, donde se «Declara ladinos a los indígenas de San Pedro Sacatepéquez, San Marcos». Política de exterminio de una comunidad maya mam con la que estratégicamente se abre camino al etnocidio del idioma y la cultura, dando privilegio únicamente al español como idioma oficial.
Como resultado de esta política está la creación de programas de castellanización en las comunidades mayas y la formación de promotores mayas para enseñar el español. Para ser promotor se requería quinto o sexto grado de primaria y se les encargaba la enseñanza de español a los adultos, jóvenes y niños en las comunidades. El objetivo principal del programa de castellanización era que la niñez indígena aprendiera español y dejaran de hablar el idioma maya.
Lo ya referido es un ejemplo de los programas y las políticas implementadas en Guatemala que se han usado en las veintidós comunidades lingüísticas mayas, xinka y garífuna. En estas, en los últimos tiempos, se han creado programas de educación bilingüe intercultural para los pueblos mayas, con maestros y promotores bilingües, cuando debiera ser al revés.
Entorno a estas acciones desde el sistema educativo, cada gobierno de turno tiene sus propios programas y políticas sobre la población indígena. Como el caso de los programas bilingües o bilingüe intercultural, en los que los idiomas mayas han sido utilizados y reconocidos como el «dialecto» o «lengua» de la comunidad. También, el uso folclórico de los idiomas mayas cuando se les pide a los niños, las niñas y jóvenes que memoricen pequeños saludos en idiomas indígenas para decirlos en actos cívicos y culturales. Esto ha traído como consecuencia que entre los niños y jóvenes ya no hablan los idiomas indígenas en sus espacios de clase, ni al salir de ella. En su lugar, se usa español, con lo cual los niños y jóvenes llegan a ser monolingües en español.
En el sistema educativo, principalmente, el idioma español es el idioma de prestigio y los idiomas nacionales están en un segundo plano. Esto da como resultado que los niños y jóvenes ya no hablan su idioma materno antes y después de la escuela, prefieren comunicarse en español con sus compañeros; también se usa en la iglesia. Luego, al ir a casa, siguen hablando en español, mientras que los padres de familia intentan el uso del español con sus hijos, aunque no sepan hablar bien. Y no se dan cuenta que el propio idioma maya o indígena se está perdiendo paulatinamente desde el seno del hogar de la familia.
Es interesante preguntar ¿cuándo se da el bilingüismo o quién es el bilingüe en Guatemala? En respuesta, el bilingüismo no se da ni en la escuela ni en el hogar. El estudiante o hijo y padre de familia están dejando su idioma materno y pasan a ser monolingües en español. Otros padres de familias han aprendido palabras prestadas, desde el aprendizaje de sus hijos o desde los espacios donde prestan sus servicios comunitarios y religioso; palabras que ajustan a la fonología y morfología propia de los idiomas mayas o idiomas nacionales. Ejemplo, nusiya «mi silla», pa aweskwela «en t escuela», pa munisipalida «en la municipalidad», Dyos katb’ano bendesir, «Dios te bendiga», qab’ana’ k’osar «gocémonos», tab’ana kwenta por favor «cuídese por favor», etc.
Esto ejemplos son comunes en los distintos espacios. Por otro lado, los jóvenes mayas que están dispuestos aprender o retomar su idioma materno, ya no utilizan las palabras correctamente, usan muchas palabras prestadas e incluso párrafos completos del español para desenvolverse en todos los espacios públicos.
Esta situación se ha venido dando desde hace siglos y se sigue replicando en pleno siglo XXI y, como consecuencia, no se desarrollan los idiomas mayas o indígenas en Guatemala. Muchos hablantes no ven ningún conflicto en esto, porque saben que el idioma español es el de prestigio en su contexto y, por eso, no les afecta, pero no se dan cuenta de que están eliminando su idioma materno y su sistema de pensamiento.
En respuesta a estos cambios, organizaciones y personas conscientes de la importancia que tiene un idioma luchan para la reivindicación de los idiomas nacionales. Dichos idiomas son también de prestigio en sus propios territorios, a pesar de los pequeños o grandes cambios que se están dando en el nivel lingüístico, político y social. Lo ideal sería que los veinticinco idiomas de Guatemala fueran de prestigio en todos los ámbitos; nuestro sueño, es que esto sea una realidad.
El Estado ha venido impulsando diferentes tipos de políticas sobre los idiomas nacionales. En el 2007, se aprobó el Acuerdo ministerial No. 1447-2007 mediante el que se promulgó un bono por bilingüismo para maestros bilingües. Sin embargo, los maestros con o sin incentivos, no cumplen con su tarea asignada. Muchos de los maestros no son de la misma comunidad, por lo cual, no hablan el idioma de la comunidad; además, muchos de ellos no saben leer y escribir su idioma materno.
Este problema viene dándose desde los programas de castellanización y desde la evangelización de los pueblos. Ahora, desde las escuelas quieren «salvar» con incentivos o bonos el uso de los idiomas nacionales, cuando es ahí donde se empezaron a desvalorar y prohibir. Se ha dicho que los idiomas indígenas carecen de gramáticas, que no son idiomas y que no aportan al mundo moderno, refiriéndose que su sistema de pensamiento no sirve. Hoy, para los que trabajamos en los idiomas mayas, la ciencia lingüística nos ha aportado la base para comprender y entender el sistema de pensamiento, los sentimientos y el sistema de ver la naturaleza a profundidad. Esto para mostrar que los idiomas y la cultura de los pueblos originarios pueden aportar al mundo de hoy.
Para enfrentar la situación ha surgido la necesidad de crear de la Academia de las Lenguas Mayas de Guatemala como ente rector de los idiomas mayas en el país. Se creó con el respaldo del Decreto 65-90 Ley de Creación de la Academia de las Lenguas Mayas de Guatemala, que en su artículo 1 dice:
Se crea la Academia de las Lenguas Mayas de Guatemala, como una entidad estatal autónoma, con personalidad jurídica y capacidad para adquirir derechos y contraer obligaciones, patrimonio propio y jurisdicción administrativa en toda la República en materia de su competencia. La Academia coordinará sus acciones políticas, lingüísticas y culturales de las comunidades mayas con los Ministerios, entidades autónomas y descentralizadas del Estado y demás instituciones con ella relacionadas.
El Artículo 5 (Cargo: Atribuciones), cuenta con 10 incisos. Hasta el año pasado se están dando cumplimiento a tres de ellos:
c) Crear y promover centros de enseñanza de los idiomas mayas en las comunidades lingüísticas y promover la enseñanza de tales idiomas en los demás centros educativos de la República.
d) Traducir y publicar, previo cumplimiento de las leyes de la materia, códigos, leyes, reglamentos y otros textos legales o de cualquiera otra naturaleza que se juzgue necesario a los idiomas mayas.
e) Apoyar plenamente la educación bilingüe aditiva que realiza el Estado en cumplimiento de sus funciones.
Y esto ha despertado el interés de maestros hablantes de los idiomas mayas y español para buscar una certificación y aval con firma y sello de la Academia de Lenguas Mayas de Guatemala. En coordinación con el Ministerio de Educación, se pide como requisito para optar a un puesto de trabajo en el ministerio u otros espacios donde se trabajan temas indígenas, donde se necesite saber hablar y escribir un idioma nacional.
Vale mencionar que en varias instancias del Gobierno se están abriendo espacios para los idiomas nacionales, por ejemplo, en el Viceministerio de Educación Bilingüe Intercultural a través de la Dirección General de Educación Bilingüe Intercultural (DIGEBI) y el Organismo Judicial, que cuenta con 99 intérpretes, aunque no están representados los idiomas indígenas del país. Por su parte, el Instituto de la Defensa Pública Penal contribuye al fortalecimiento de una cultura de paz mediante el servicio de atención de casos con pertinencia cultural. Además, fue creada la Unidad de Pueblos Indígenas e Interculturalidad como parte de Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, que contempla la promoción y fortalecimiento de la atención con pertinencia cultural. A pesar de estos esfuerzos, aún no se han logrado la cobertura a nivel nacional, pues algunas instituciones están en la capital, pero no en las comunidades mayas. Solo la Academia de Lenguas Mayas de Guatemala tiene presencia en las comunidades lingüísticas.
El Decreto 19-2003, Ley de Idiomas Nacionales, es un instrumento sociopolítico que contribuye a fortalecer la vitalidad y los ámbitos de uso de los idiomas nacionales, en cada uno de los territorios donde se habla. Así como se menciona en su Artículo 8:
En el territorio guatemalteco los idiomas Mayas, Garífuna y Xinka podrán utilizarse en las Comunidades Lingüísticas que correspondan, en todas sus formas, sin restricciones en el ámbito público y privado, en actividades educativas, académicas, sociales, económicas, políticas y culturales.
Aunque, veinte años después de su entrada en vigor, el mencionado artículo aún no se cumple. Con base en este artículo, se han implementado algunos talleres, diplomados, formaciones de jóvenes mayas y maestros, y coordinaciones con otras instituciones; sin embargo, esto no es suficientemente para el desarrollo y mantenimiento de los idiomas nacionales. Mientras tanto, en los hogares y comunidades lingüísticas se están perdiendo los idiomas; allí no hay asistencia alguna para su reivindicación.
En la actualidad, los padres de familia prefieren que sus hijos solo hablen español para evitar que sean excluidos y discriminados en los diferentes ámbitos de la vida social, cultural, política y económica. Sumado a esto, las expresiones y amenazas de los mismos maestros han sido otro factor de estos cambios en los idiomas nacionales en Guatemala, pues algunos docentes les dicen a sus alumnos que los castigarán si hablan su idioma o amenazan con mandar una nota a sus padres porque no quiere aprender el español.
Hoy día, se quieren cambiar y reivindicar los idiomas nacionales desde las escuelas; aunque el problema es no poner en acción los planes y la falta de voluntad de los maestros bilingües. Con o sin bono, muchos maestros bilingües ya se jubilaron o están por jubilarse y ellos son sustituidos por otros docentes sin experiencia con las consecuencias que esto implica en el seguimiento de los programas.
Otros factores que influyen en la pérdida de los idiomas nacionales tienen raíces históricas en la dominación, el racismo, la discriminación, la desigualdad, la invasión o la migración interna y externa, entre otros.
La migración interna ha surgido por problemas de tierras y por la falta de trabajo, lo que hace que personas o familias completas salgan de sus comunidades y abandonen sus territorios en busca de nuevas oportunidades, espacios y una vida digna. Todo esto significa cambios culturales, nuevos hábitos; la necesidad obliga a aprender otro idioma y otro sistema de vida. Así se empieza la otra forma de vida para los padres familia, pues ven la importancia de aprender el español por la misma necesidad que afrontan al transitar en los diferentes territorios. Este fenómeno trae consigo dos cambios: primero, la pérdida paulatina del idioma materno de los niños y jóvenes e incluso la de toda una familia; segundo, los préstamos del vocabulario del idioma español, con la fonología, morfología del idioma materno. A pesar del desprecio, discriminación y exclusión que afrontan las familias, luchan a diario para hablar el español, aunque pronuncian mal las palabras, con tal de conseguir lo necesario para sobrevivir.
Los préstamos que se dan y se siguen dando en todos los idiomas indígenas tanto en el territorio nacional como en el antes conocido como Mesoamérica, especialmente en los ámbitos educativos y religiosos. Para ilustrar un poco el fenómeno de los préstamos lingüísticos, recientemente se realizó una investigación en una comunidad sobre el tema del agua, sobre el cuidado y comprensión del agua desde el pensamiento maya. En el diálogo realizado en idioma maya kaqchikel participaron abuelas y abuelos mayas de 46 a 88 años. El diálogo duró, aproximadamente tres horas y llamó la atención del uso de los préstamos lingüísticos.
El siguiente texto está en el idioma Kaqchikel, y los préstamos del español están en negrita:
Oxi’ yab’e naj el. Oxi’ lewa ri’ jampe más o menos doce kilometros. Entonc(e) xeb’e rachin xekitz’eta’ chi qitzij k’o ya’. Roma ri’ xpe ri ya’ xb’an pe utzil. Komo chupan ri tiempa ri’ k’a interana ri fayna (fauna). Nechapala’x rachin yeb’e pa kisamäj. Peer(o) yechäp ma yeb’e ta pa kisamäj. Mejor yeb’e chi’anik ya’ nikireja’ q’ayis niki’ana’ rub’ey ya’. Iiii kwanta samaj xrukwaj kwanto tiempa xki’an pe ri pwora chuk’amik ri ya’. Per(o) ri xke’en pe jun, ri xpe ri xk’amon pe ri ya’ jun laj ingeniero ta k’a riri’ ooo manäq. Xkikanöj ri niweel choq ok niweel ri juyu’ kitaq re’ ru’analon kan choq niweeeel kan nusilila’ ri’ niweeel xpe ri ya’ kere’ xu’an kere’ nu’an chuwa taq juyu’ xpe., xuqa qa ri ya’.
Este pequeño texto del idioma kaqchikel tiene 126 palabras e incluye 23 palabras prestadas del español y viene del diálogo de un abuelo de 86 años. Pongo los textos del diálogo, para mostrar que los idiomas cambian paulatinamente hasta llegar a su extinción por los mismos hablantes.
Para mostrar este problema, se presenta ahora un pequeño diálogo con dos abuelos uno de 52 años y el otro de 48 años. Los dos abuelos tienen un grado de formación desde la escuela, padres de familia y ahora son miembros del consejo de ancianos de la comunidad.
Y komo kela mama’ taq juyu’ je’el numol kan ri ri ya’. Entonces jachik jun ri forma ri nayik kan ri aya’. K’iy ri winaqi’ natz’et ma jun kiya’ ta pa la ruwi’ taq lamina nkemol wi. Jala’ nkikusaj. Entonces.
Ya xqa’ij yan qa, k’o ruvalor. Jari’ ri qak’aslen. Achi’el xu’ïj qa ri nana’ chpan ya’ mu’ul wi ri qach’akul. Xa xe yojaläx janta pe ri ya’ in janta pe la riri’. Jari’ k’aslen ri ya’ k’aslen. Keri’ chqawäch ri röj. Talas de árboles. Uuuuy, ronojel. Nkik’ayij. Principalmente ri Muni. Keri’ nu’an. El alcalde medio esa misión, pero no lo voy a hacer.
Cómo poder recuperar. Bueno toda mi vida, mi papá, siempre me ha enseñado, mijo, aquí tenemos bosque, pero no, nunca hagas lo que hace la gente, le vende a un aserradero, sus 5 o 10 cuerdas. Porque, reciben buen dinero. Pero ese dinero, se va inmediatamente. Solo hace para tú uso. Baja un palo, darle gracias a Dios, que están creciendo solo, chapea, déjalo que valla creciendo. Porque de un solo vas a botar todo, no vas a tener mañana, y vas a afectar a los vecinos, a los nacimientos de agua. Ahora bien. Entonces aprendiendo esto de mi papá y de los abuelos.
Esta pequeña muestra de diálogo entre dos abuelos tiene mucho que decir sobre el cambio radical del abuelo, que explica su sentir sobre el tema del agua desde el idioma español. Esta es la realidad lo que está pasando en muchas comunidades.
Este problema se ha venido dando desde hace muchos siglos, como se ha descrito anteriormente. Para demostrar esta afirmación se pueden estudiar los diferentes documentos o manuscritos históricos escritos en el alfabeto latino por escritores y traductores mayas que fueron evangelizados y castellanizados en su momento. Están también documentos escritos por sacerdotes interesados en aprender los idiomas mayas o indígenas para lograr la cristianización y castellanización. En el siguiente apartado se presenta cómo empezaron a utilizarse los préstamos léxicos y lingüísticos y el rompimiento del uso del idioma maya desde el ojer tz’ib’ («escritura antigua»).
Como muy bien se conoce, el pueblo maya tiene su propio sistema de escritura: el tz’ib’. Dicho sistema se perdió por varias razones: históricas, políticas, climáticas y migración. Luego fue sustituido por la escritura latina, como muestran esto dos manuscritos: el Popol Wuj, escrito por los escritores mayas nim chokoy y la Teología Indorum, escrita por Fran Domingo de Vico, seguramente con apoyo de hablantes de los diferentes idiomas mayas.
La escritura antigua aún se ve desde los entramados del petate y los tejidos de cada comunidad, aunque no se reconoce como tal; pero la historia viva de los pueblos mayas principalmente del pueblo k’iche’, está en el Popol Wuj abordado por estudiosos nacionales o extranjeros según sus intereses. El manuscrito de este libro contiene el ojer tzij (la palabra, historia antigua y la vida); este fue escrito en el idioma k’iche’ con el alfabeto latino del siglo XVI.
Los manuscritos de la Teología Indorum fueron escritos en varios idiomas mayas por Fray Domingo de Vico y fueron utilizados para la cristianización y castellanización. Las y los ajtzíb’ab’, escritores mayas, sustituyeron el sistema tz’ib’ por el alfabeto latino del siglo XVI. En estos manuscritos se ve claro y marcado lo que los abuelos ajtz’ib’ab’ dejaron escrito. Con este manuscrito empezó el rompimiento y el uso de los préstamos en los idiomas mayas.
En Popol Wuj se escribe:
Wa’e xchiqatz’ib’aj chi upam chik uch’ab’al Dios, pa christianoil chik. Xchiqelesaj rumal maja b’i chik ilb’al re Popol Wuj(...)
Esto lo escribiremos en las prédicas de Dios, en el cristianismo. Vamos a sacarlo a la luz porque ya no hay dónde ver el Popol Wuj.
(Sam, 2008, pp. 23-23)
En la Teología Indorum se afirma:
Ronojel nima b’iaj k’o, chi upam uch’ab’al Dios, uk’ununisaxik k’ut kajawaxik ketamaxik, rumal utzilaj taq winaq krisyanos uk’oje’ik chi upam K’iche’ ch’ab’al tz’ib’am wi’. Wa’ we k’astajib’al wach, k’astajib’al pa k’u’x, chi rech utzilaj winaq ilol wuj, ta’ol pa re loq’olaj b’i’aj k’o chi upam ri nima wuj.
(Teología Indorum. (1553), tomo I. folio I, recto-k’iche)
Todo del gran nombre que hay, entre el hablado de Dios, la muestra entonces, que está gobernado, que esta entendido, por buena gente cristiana de existencia [de Dios] dentro del idioma K’iche’ escrito aquí. Esto es la resurrección de la imagen, la resurrección en el corazón, para la buena gente, lectores del libro, pedidores del nombre querido que hay en el gran libro.
(Teología Indorum. (1553), tomo I. folio I, recto-castellano)
En este párrafo se introducen las primeras dos palabras prestadas: «Dios» y «cristiano», claves para la evangelización y la castellanización, la introducción de los préstamos del idioma español en los textos y diálogos en los idiomas de los pueblos originarios.
De igual manera, los documentos de Teología Indorum fueron escritos en varios idiomas mayas como el k’iche’, q’eqchi’ y tz’utujil, entre otros. Se utilizan los términos «Dios» y «cristiano» y, por supuesto, se incluyen textos completos de la Biblia cristiana.
El uso de los términos bíblicos refleja mucho más en los discursos actuales de las personas y familias en las comunidades. Estos discursos se pronuncian en contextos espirituales y ceremoniales. Se utilizan, además, para justificar la forma de vivir en comunidad y para buscar la armonía con la naturaleza. También se utilizan para solucionar conflictos entre comunidades o familias. Un ejemplo es una intervención de un abuelo de 86 años, en la que se usan préstamos léxicos y lingüísticos provenientes de los textos bíblicos en español, pero aplicado la fonología y morfología del idioma maya kaqchikel.
Qetaman, todos. ¿E wetaman etz’aton ri biblia? Jari’ nub’ij in ronojel nkich’ojij ri pueblo de Israel che ri Moises. Ri Moises nu’ij chre ri qatata k’o chla chikaj kän niya’ xya’ ronojel xya’ ri kiya’, xya’ ri k’utu’n chke ti q’utu’n xya’ chke. Xaqkorowäch, Saqkorowäch. Majun q’utu’n ta tz’aran chwach’ulew e k’o per(o) to xeqa ri chokopi’ ri es obra de Dios. Toq xetoqa kik’in kami tichepa’ tich’olo’ titija’. Choq ok xkiya’ ki’ taq chikopi ma xi’animaj ta. Ahí está la carne. Qak’ama’ k’a ejemplo ri’ chrij qach’alal wakami chi nuqa chiwichin yïn, qak’utuj chre ri Dyos kojtzijon che ri Dyos, pero así sinceramente con una fe verdadera.
Todos conocemos. ¿Todos han leído la biblia? Este es lo que dice. Que el pueblo de Israel, esto le paso a Moisés. Moisés le dice a nuestro padre que esta en el cielo, que nos des. Y le dieron, todo. Les dieron agua, les dieron comida. Que comida les dieron, les dieron pájaros. Porque no había comida sobre la tierra. Pero, cuando llegaron los pájaros, fuer la obra de Dios, cuando llegaron con ellos. Ahora, a cazar pájaros, así fue, los pájaros no se espantaron. Así fue comieron carne de pájaros. Tomemos eso como ejemplo, pidamos a Dios. Hablemos con Dios, peros así sinceramente con la fe verdadera.
(Traducción propia, 2023).
En esta muestra se ve el uso de los préstamos léxicos y lingüísticos del idioma español, producto de la castellanización y evangelización de los pueblos originarios.
Los textos escolares constituyen otro problema. Los contenidos de los textos son pensados y elaborados desde el idioma español y, luego, traducidos a los idiomas mayas. Los autores no se fijan ni se interesan en el contenido y las ilustraciones que llevan los textos, pues no evalúan si se ajustan o no a la realidad de las comunidades lingüísticas
Actualmente, los maestros, traductores y escritores de los idiomas nacionales ya hablan de neologismos y usan algunos que han sido creados desde la estructura del idioma nacional. Las creaciones de neologismos ya son costumbre en la mayoría de los idiomas mayas. A continuación se incluyen algunas palabras ausentes en la cultura e idioma nacional, pero que hoy son necesarias: taluwach, «televisor»; kematz’ib’ «computadora»; bukut, «tenis» o «zapatilla de deporte»; let’et’, «bicicleta»; mixku’ «manzana», etc. Estas palabras respetan la estructura morfológica y las derivaciones que permiten los idiomas mayas.
Otro problema para la enseñanza de los idiomas mayas en la escuela es el idioma de enseñanza, pues los maestros, siendo mayas, enseñan y utilizan el español para enseñar el idioma maya. Este problema, aún no ha sido resuelto. En los idiomas tz’utujil, kaqchikel y k’iche’ ya se ha avanzado porque ya se cuenta con una gramática monolingüe maya. Esta ha sido usada como base para la creación de neologismos acordes con la fonología y la morfología del idioma maya; también se han rescatado palabras caídas en desuso y algunas retomadas de los manuscritos históricos. Esto es una muestra de esfuerzo y voluntad para trabajar desde los idiomas nacionales.
Los idiomas de los pueblos originarios en Guatemala son reconocidos como idiomas nacionales en sus propios territorios. Dicho reconocimiento, aún no se cumple de acuerdo con lo establecido en ley: los maestros bilingües, los funcionarios públicos y otros espacios de la vida pública del Estado guatemalteco en las comunidades mayas siguen utilizando el idioma español como lengua franca. Mientras tanto, los idiomas indígenas siguen siendo utilizados en los espacios culturales y cívicos como un elemento más de la folclorización.
Los idiomas nacionales en Guatemala están en peligro de extinción por falta de atención y espacios para su promulgación en los distintos medios de comunicación. En estos espacios lo que se dan es la exclusión y discriminación lingüística hacía los idiomas indígenas. Espacios que, de alguna manera, cooperan en el desplazamiento y pérdida de los idiomas nacionales. En realidad, hay muchas situaciones que provocan los cambios de desplazamiento lingüístico. Por ejemplo, el problema de la migración interna y externa de personas, familias y grupos, que van en busca de nuevas oportunidades de trabajo y económicas. Este cambio, radical trae consigo, la pérdida del idioma materno y se ven obligados a aprender la lengua española. Por ende, la nueva generación de estas familias, ya no tienen la oportunidad de aprender y usar su idioma materno, hasta dejarlo morir.
Los programas del Gobierno y las sectas religiosas siguen incidiendo en las comunidades siendo causantes de la inclusión y uso de préstamos de léxicos y lingüísticos del español. Dos espacios, donde se desarrolla más el uso de los préstamos de léxicos y la pérdida de uso de los idiomas indígenas.
En las escuelas bilingües, donde se supone que se enseñan los idiomas nacionales, se sigue usando el idioma español para enseñar la cultura y el idioma maya. Y no se diga en las iglesias, en las que sus prédicas y doctrinas son expresadas en español y, cuando usan el «idioma maya» para las prédicas, usan un 60 % o 70 % de vocablos en español. Es decir, el español sigue ganando espacios en los ámbitos social, político y religioso de las comunidades mayas; mientras tanto, los idiomas nacionales siguen en peligro de extinción e incorporan muchos préstamos del español.
Está claro que se usan préstamos léxicos y lingüísticos dentro de la estructura de los idiomas mayas; esto es así desde hace muchos siglos. Los primeros préstamos de léxicos están registrados en los manuscritos del Popol Wuj y en la Teología Indorumn, documentos que muestran el rompimiento de uso del ojer tz’ib’ (escritura antigua). Dichos documentos, que fueron escritos con el alfabeto latino del siglo XVI, fueron usados con la doble intensión de castellanizar y cristianizar. El sistema se mantiene, pues en los diálogos y escritos se evidencia el aumento de préstamos de léxicos y lingüísticos en el uso de los idiomas indígenas. Un ejemplo de ello puede verse en textos en el maya kaqchikel en pleno siglo XXI:
Qetaman, todos. ¿E wetaman etz’aton ri biblia? Jari’ nub’ij inronojel nkich’ojij ri pueblo de Israel che ri Moises. Ri Moises nu’ij [ ...] e k’o per(o) to xeqa ri chokopi’ ri es obra de Dios.
Esta muestra fue tomada de un diálogo sostenido con un abuelo de 86 años y muestra cómo se produce el uso de palabras en español en personas mayores. Esto es más evidente entre los jóvenes y, en el caso de los niños, muchos se expresan en español y no en el idioma indígena de la comunidad. Es un problema en todos los idiomas nacionales en Guatemala.
Juun, ka’i’ oxi’ ta rucholaaj ja ruk’ayewaal ruk’extajiik ee k’o chi paan taq qatzijob’al. Netajiini netzaaq kaan, nesajcha kaan, nerwaan kaan owi neekaam kaan chi jutiij.
Ja winaqii’ ja ma tikajo’ nkeek’ut ruuk’u’x, ruxe’aal k’in rujotayiil ja kitzijob’ai. Tiqaya' rutzijoxiik najt naqaaj, tiqaya’ ruuq’iij ja qatzijob’al rumaal chi ri k’o na’ooneem no’jiineem rixiin k’aslemaal.
Los presentados son algunos de los problemas y cambios que se dan en nuestros idiomas indígenas. Muchos los están abandonando, los están perdiendo, los están adormeciendo o los están matando. La gente ya no quiere enseñar la esencia, el corazón, la raíz y el retoño de nuestro idioma. Hablemos, pronunciemos y valoremos nuestro idioma, porque en su estructura está el sentir y el pensar de nuestra existencia.
Muchas gracias.
Nk’amowaaj chi eewe ewonojeel
Ajpub’ García