El ICEX y el español como recurso económico José Manuel Reyero
Vicepresidente del Instituto Español de Comercio Exterior (España)

A lo largo de la historia la lengua ha sido, aparte de un vehículo de transmisión de conocimientos, cultura y entendimiento entre los pueblos, un medio de penetración política así como económico-comercial de las grandes potencias internacionales.

Con el paso del tiempo en los principales países ha ido desarrollándose un sector económico, cada vez más dinámico, relacionado con el idioma, hasta el punto de que en Inglaterra la industria del inglés ha superado ya en ingresos a la industria del automóvil.

Es generalmente aceptado que el idioma es una herramienta eficaz para la venta de un gran número de productos y servicios relacionados con él, así como de otros no directamente ligados a la lengua, pero inducidos por ésta, y que se trata de una actividad que indiscutiblemente genera imagen de país.

La lengua española es el principal activo económico que posee España y que comparte con otros países hispanohablantes (400 millones) y su promoción se considera parte de una política de Estado que debe vertebrarse bajo un prisma único.

El Gobierno español, y en concreto el Ministerio de Economía, a través del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX) ha reflejado históricamente la importancia que concede a las industrias relacionadas con la lengua en términos económicos, hasta el punto de que lo ha declarado sector prioritario en el Plan de Internacionalización presentado la primavera pasada.

El Instituto Español de Comercio Exterior ha acuñado el término «español como recurso económico» en 1995 para referirse al macrosector o plataforma que abarca todas las industrias relacionadas con la lengua: Sector editorial, audiovisual, música, servicios educativos (enseñanza del español como lengua extranjera y enseñanza en español para extranjeros), nuevas tecnologías relacionadas con la lengua y los medios de comunicación. Y me complace enormemente el hecho de que este congreso haya adoptado esta misma expresión «español como recurso económico» como uno de los temas centrales de debate.

La importancia que el Instituto concede a las industrias de la lengua tiene su reflejo en la asignación presupuestaria que en 2001 asciende a más de 1000 millones de pesetas (6 millones de euros), cifra importante que en términos relativos supone el 5,5 % del presupuesto total disponible para invertir en las actividades de promoción comercial exterior de los 117 sectores productivos con los que trabajamos (presupuesto total = 19 637 millones de pesetas o 118 millones de euros).

A continuación vamos a conocer sucintamente las características específicas de cada sector y las líneas básicas de acción que estamos desarrollando en cada caso.

1. Sector editorial

Es un sector tradicional, maduro, claramente exportador (14 % de su facturación) y pionero en el proceso de internacionalización, pues cuenta con más de 110 empresas filiales en una treintena de países. Lo forman 3100 empresas, de las que 640 son exportadoras habituales; en el año 2000 facturó 488 354 millones de pesetas (2935 millones de euros) y en 2001 exportó 106 000 millones de pesetas (637 millones de euros), incluyendo producto editorial y gráfico.

Desde la creación del Instituto en 1982 se trabaja continuadamente con el sector editorial. En el año 2001 se han dedicado, por parte del Instituto,113 millones de pesetas (679 000 euros) para su promoción comercial exterior.

Los mercados prioritarios, además de los tradicionales como Méjico y Argentina, son los EE. UU., Brasil y Japón.

Las actividades más relevantes de 2001 han sido:

  • Las misiones inversas de compradores y bibliotecarios para visitar la oferta expuesta en Liber.
  • La participación agrupada de las empresas con la Federación de Gremios de Editores de España en las principales ferias del sector (Frankfurt, Guadalajara, Buenos Aires, Bookexpo en Chicago, Río de Janeiro, La Habana y Londres).
  • La organización de un pabellón oficial en la feria ALA (Asociación de Bibliotecarios Americanos) en EE. UU.
  • La confección de catálogos como el de derechos disponibles.
  • La elaboración de una base de datos de hispanistas en colaboración con el Instituto Cervantes y la Dirección General del Libro que se presenta en este Congreso y que nos va a permitir, por primera vez, contar con una información actualizada y completa de la actividad y distribución geográfica de la imponente red de hispanistas que hay en el mundo.

2. Sector audiovisual

El motor del sector audiovisual son las actividades de producción y distribución de Cine, Televisión y Animación. Se trata de un sector en un claro proceso de crecimiento internacional y también en España, debido a la expansión de la demanda mundial de productos audiovisuales, el desarrollo de las nuevas tecnologías de información y comunicación y de la implantación a escala internacional de una extensa cultura de la imagen.

Citando como ejemplo el caso de la producción española de cine, en 10 años (1990/2000) se ha duplicado el número de rodajes, se ha triplicado la recaudación en taquilla, se ha multiplicado por cuatro la recaudación en taquilla de cine español y se ha multiplicado por cinco la inversión total en la producción de películas.

No obstante, conviene recordar que también es un sector sometido a una gran competencia de las producciones norteamericanas dentro y fuera del mercado nacional.

La producción audiovisual española factura unos 375 000 millones de pesetas (2254 millones de euros), exporta 24 600 millones de pesetas (148 millones de euros) y comprende 2900 empresas que emplean a 16 000 personas (año 2000). Las empresas que tienen vocación y actividad internacional son unas noventa.

Al margen de sus cifras económicas, la importancia del sector audiovisual radica en su capacidad para generar imagen de país, es decir, que es un sector que puede proyectar en el exterior el potencial económico, cultural, social y tecnológico de España como país moderno y de primer rango internacional. Asimismo, es evidente la capacidad de las cinematografías para proyectar la imagen de otros sectores como el turismo, la moda, la gastronomía, etc., captando y fidelizando consumidores a escala internacional.

El ICEX trabaja con este sector desde 1995, negociando el Plan anual con la Federación de Productores Audiovisuales (FAPAE), y ha sido declarado sector prioritario para la Secretaría de Estado de Comercio y Turismo; esto significa que la asignación presupuestaria para los tres próximos años es de 500 millones de pesetas anuales (3 millones de euros). Los mercados prioritarios además de la UE (supone el 70 % de la exportación) son EE. UU. (15 %) y Latinoamérica(10 %).

Las principales actividades desarrolladas en el año 2001 son:

  1. Para el sector del cine
    • Stands informativos en las principales ferias (Marché International du Film de Cannes, Berlin, American Film Market, Mifed de Milán).
    • Screenings de Lanzarote, screenings previos al American Film Market.
    • Invitación a compradores al Festival de Málaga.
    • Colaboración en muestras de cine español en EE. UU., «Spanish Cinema Now» en Nueva York, y «Recent Spanish Cinema» en Los Ángeles.
    • Apoyo al Foro Iberoamericano de Coproducciones en el marco del Festival de Huelva.
  2. Para el sector de televisión
    • Organización del pabellón español en la feria NATPE en Las Vegas y en DISCOP TV en Budapest.
    • Stand informativo en MIPCOM TV de Cannes.
    • Misión inversa de compradores de documentales al mercado de Málaga.

Además, se ha puesto en marcha a mediados de este año un programa específicamente diseñado para incentivar el estreno de películas españolas en salas comerciales en el exterior, cuyos resultados podrán contabilizarse a partir del año próximo.

3. Enseñanza del español como lengua extranjera

Es un sector muy joven, que empezó a vertebrarse en su proyección internacional en 1995 con el respaldo del ICEX, que cuenta con cifras notables y con una gran potencial de crecimiento.

Su núcleo está formado por los centros que imparten la enseñanza del español como lengua extranjera y por aquellas firmas editoriales especializadas en la materia. Se contabilizan 227 empresas, que emplean a 3316 personas, con una facturación de 47 553 millones de pesetas (286 millones de euros), y una exportación de 34 120 millones de pesetas (205 millones de euros). Se identifica un núcleo estable de 70 empresas que participan en el plan de promoción del Instituto.

A esta descripción de los sectores que comprende habría que incorporar en el futuro dos subsectores de creciente importancia: Los servicios educativos para la enseñanza en español (carreras universitarias, cursos de postgrado, o cualquier tipo de enseñanza especializada) y el de las nuevas tecnologías (software educativo y enseñanza virtual). Para el año próximo esta previsto realizar un estudio de oferta de estos subsectores, que no están organizados asociativamente ni claramente identificados, por lo que no disponemos de datos económicos. A partir de ese momento lo correcto sería comenzar a hablar del sector de servicios educativos como una plataforma que engloba la enseñanza del español como lengua extranjera y la educación en español.

El ICEX ha ido adaptando a los requerimientos de las empresas sus posibilidades presupuestarias, pasando en 5 años de 30 (180 000 euros) a 300 millones de pesetas (1,8 millones de euros) anuales para actuaciones de promoción comercial de este macro sector de servicios educativos. Siendo los países prioritarios la UE (70 % de la exportación), EE. UU. (20 %), Brasil (3 %) y Japón (5 %). Para la educación en español habrá que dedicar especial atención a los países latinoamericanos.

Las principales actuaciones apoyadas en el año 2001 son:

  • Pabellones oficiales en los siguientes congresos y ferias. ACTFL(Congreso de Profesores de Lenguas Extranjeras) y NAFSA (Congreso de Universidades para Estudios en el Exterior) ambas en EE. UU.
  • Participaciones de empresas, agrupadas por la asociación ERE (Español como Recurso Económico) en las principales ferias y congresos de educación y de idiomas: AATSP (Congreso de Profesores de Español y Portugués en EE. UU.), Salón del Estudiante (Bahía, São Paulo y Belo Horizonte), Expolangues de París, Convención ARELS (Escuelas reconocidas por el British Council) en el Reino Unido, Workshop de Berlín, Pacific Rim Workshop en Tokyo, International Education Expo en Chang-Chung (China), Expoestudiante en Santiago de Chile.
  • 4 misiones inversas de compradores, y prescriptores de opinión procedentes de varios países europeos, EE. UU. y Latinomérica.
  • Diseño de un portal educativo «Eduespaña» que englobe toda la oferta de servicios educativos en España.
  • Confección de material promocional.
  • Primeros pasos para la realización de dos estudios de mercado: uno sobre la educación internacional en español y otro sobre el español para fines específicos (negocios, telecomunicaciones, hostelería, sanidad…).
Algunos aspectos interesantes para el debate son:
  • La adecuación del DELE (Diploma de Español como Lengua Extranjera) para facilitar el acceso automático de estudiantes extranjeros a la universidad española.
  • La propuesta de creación de una Comisión del Español en el seno de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Culturales que sirviese para la elaboración de una política de estado, estableciendo estrategias y objetivos comunes y supervisando su implementación en todos los departamentos u organismos implicados: Instituto Cervantes, Ministerio de Educación y Cultura, Ministerio de Asuntos Exteriores, Ministerio de Economía (ICEX y Turespaña).

4. Música

El sector musical desempeña un importante papel en las industrias culturales y tiene claros efectos inducidos en la difusión de la lengua. ¿Qué estudiante de francés o de inglés no ha escuchado decenas de veces los discos de Jacques Brel, Brassens o los Beatles hasta descifrar las letras?

En sentido amplio el sector comprende: artistas, autores, editoriales, instrumentos musicales, productoras discográficas, managers o representantes y promotores de espectáculos. Se trata de un sector fragmentado en el que no resulta sencillo ni una interlocución general para establecer líneas de actuación comunes, ni la elaboración de datos estadísticos que aporten información de tipo económico.

El ICEX comenzó los contactos con la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores) en 1995 y desde entonces se ha apoyado la presencia de autores y editores en las principales ferias comerciales del sector (Pop Kom en Colonia, Midem en Cannes, o Musicora en Paris). Además, se ha publicado la primera guía de la música exportable. Para el 2002 el ICEX organiza el pabellón español en la Musikmesse de Frankfurt y en la Namm (National Association of Musical Merchant) de Los Ángeles.

El apoyo que prevé el Instituto para este sector en el ejercicio 2002 es de 90 millones de pesetas (541 000 euros).

La exportación de bienes del sector música en el año 2000 ascendió a 16 805 millones de pesetas (101 millones de euros), de los cuales se atribuyen a productos discográficos 7986. millones de pesetas (48 millones de euros) y 23,3 millones de pesetas (140 000 euros) a edición musical.

Aparte, la balanza de pagos de España se beneficia también del impacto de las recaudaciones de los autores en el extranjero. En el año 2000 los autores recaudaron en el extranjero 4492 millones de pesetas (27 millones de euros), de los cuales, deducidos los ingresos del sector audiovisual, 3993 millones de pesetas (24 millones de euros) fueron ingresos de autores por propiedad intelectual de obras musicales. Los países de donde proceden dichos ingresos son principalmente EE. UU., Argentina, Francia y Méjico.

Conclusión

El ICEX ha sido una institución pionera al iniciar en 1995 la aproximación al sector del español, y además ha tenido la visión, acertada en nuestra opinión, de darle un tratamiento global incorporando a su núcleo central: enseñanza del idioma y materiales, los potentes sectores conexos que difunden el idioma: editorial, audiovisual y música.

La lengua es un potente instrumento que puede ser abordado desde tres aspectos distintos, pero que al final están intercomunicados:

  • cultural: permite la comunicación, el entendimiento, la transmisión de conocimientos, la expansión de la cultura, de los valores y de la forma de vida de las comunidades hispanas
  • político: como medio de influencia en la escena internacional de los países hispanohablantes
  • económico: además de los efectos inmediatos de venta de bienes y servicios, rentabiliza la actividad económica de múltiples sectores con el fin último de generar riqueza y bienestar a los ciudadanos

El español es un activo estratégico que compartimos todos los países hispanohablantes, que debería ser objeto de una decidida política de Estado en España, y tendría que buscar unas líneas convergentes con el resto de los países hispanohablantes.